Liderazgo en México


 En nuestro paisa existen grandes barreras culturales que hay que vencer. Se nos enseña a esperar al líder, a obedecerlo. El verdadero líder no pide obediencia, sino que fomenta y aprovecha las ideas, los valores, la energía y la firmeza de las personas para construir una plataforma sobre la cual el líder decide el camino. Debemos vencer esa distancia al poder, tan estratificada, que fomenta la autocracia como medio de poder y discusión. En la medida en que podamos orientarnos  hacia un liderazgo más participativo, podremos des­pertar un sentido de identificación y pertenencia, además de hacer que las cosas sucedan.

 

Como mexicanos, hay que mi­rar "hacia adentro", aprender de nosotros mismos, saber que sucede en nuestro interior y acoplarnos a nuestro entorno, encontrar el valor de reinventarnos en un mundo que cambia constantemente. Saber que pasa en otros lugares, aprender de otras culturas y experiencias.

 

Confundimos la lucha por el poder con el liderazgo. Nos confor­mamos a esperar que "otro solucione las cosas". No es de extrañar, enton­ces, que nos desilusionemos a cada paso. Cínicos, dudamos del éxito. Educamos a varias generaciones con un "nosotros los pobres, ustedes los ricos". Generamos aversión al éxito, a ser diferentes.

1 comentario: